Álvaro Morata ha sido uno de los nombres más destacados del mercado de fichajes de verano en el Atlético de Madrid. El club contaba con su permanencia, ya que su única intención era incorporar un delantero, confiando en el jugador madrileño.
Morata había manifestado en sus redes sociales su compromiso de quedarse hasta conquistar un título con el equipo colchonero. Sin embargo, tras alzarse con la Eurocopa, decidió unirse al Milan. Resultó que el trofeo rojiblanco al que se refería era ese…
Unos meses más tarde, tras no lograr destacar en el equipo italiano, llegó cedido al Galatasaray.
En una entrevista con la SER, comentó que estaba viviendo nuevas vivencias en Turquía: “Los turcos son muy amables, salvo en los días de partido… Vivo sobre el estadio de Beşiktaş y tengo que recoger a los niños cuando juegan, ya que lanzan fuegos artificiales y bengalas…”. Quizás por eso, ahora lamenta haber dejado el Atlético de Madrid durante el verano. “Si pudiera regresar en el tiempo, probablemente no me habría ido. En momentos difíciles de tu vida, tomas decisiones erróneas. Debería haber reflexionado más en verano, pero ahora ya no sirve de nada”, añadió, mencionando que “en épocas complicadas, pierdes la claridad. Me preocupaba el futuro durante la Eurocopa y era necesario actuar con rapidez. Quería sentirme valorado y querido, y el Cholo realmente tenía esas intenciones. Mi padre, mi representante y muchas personas me advirtieron que estaba cometiendo un error”.
Por último, Morata descartó la posibilidad de regresar al Atlético, recordando que su trayecto comenzó en las categorías inferiores y volvió como jugador profesional después de ser fichado del Chelsea. Por eso, regresar “ya es complicado… Debo mirar hacia el futuro y me siento muy feliz en Turquía”.
La scelta di lasciare il Milan è stata influenzata soprattutto dalle incessanti telefonate di Paulo Fonseca, allenatore della squadra in quel periodo. L’affetto mostrato dal tecnico uruguaiano ha giocato un ruolo fondamentale nella sua decisione. “L’anno scorso ho attraversato momenti difficili e ho scoperto un lato più emotivo e sensibile del Cholo. Sono rimasto colpito, non solo come allenatore, ma anche per il supporto che mi ha offerto in una situazione personale. È stata una bella sorpresa”, ha dichiarato durante un’intervista a Larguero.
Il passaggio al Galatasaray, dove è rimasto in prestito da gennaio a gennaio, è avvenuto in parte a seguito dell’uscita di Fonseca e dell’arrivo di Sergio Conceiçao. Questo cambio è avvenuto il 30 dicembre 2024, e poche settimane dopo Morata si preparava a trasferirsi in Turchia.
In merito al rigore di Julián in Champions, Álvaro ha confessato di aver visto il match di ritorno degli ottavi di finale tra Atlético e Real Madrid insieme ai suoi figli. Nonostante il suo passato in entrambe le squadre, a casa Morata ha fatto il tifo per i colchoneros. È per questo che è rimasto particolarmente infastidito dall’annullamento del rigore a Julián Alvarez. Un episodio che continua a non comprenderne il motivo: “Nessuno sembra aver avuto una visione chiara di quanto sia successo. Se fosse successo a me… sarei rimasto per due settimane a chiedermi se il pallone avesse toccato il terreno due volte”, ha aggiunto, “non si vede nulla di evidente in nessun frame. Non credo che ci siano stati due tocchi… Servirebbe un sensore nel pallone per avere certezza, come avviene negli Europei o nei Mondiali”.